jueves, 20 de octubre de 2016

LOGROS DE LA REVOLUCION DEL 44

¿Cuales fueron los logros de la Revolución del 44?
La creación del Código de Trabajo
la apertura de la educación nacional sin discriminación
la apertura de los sindicatos
la creación del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social -IGSS-
para atender la salud de los trabajadores de muchos lugares del país.
derecho de voto a las mujeres
derecho de voto a los analfabetos
reformas al tema de la moneda
Se hicieron algunos pagos de la deuda externa que tenía Guatemala
reformas a la educación
mayor apoyo al deporte por medio de la creación de la Ciudad Olímpica

Revolución de 1944 en Guatemala
La Revolución de 1944 fue un movimiento en Guatemala el día 20 de octubre de 1944, encabezado por militares, estudiantes y trabajadores, que derrocó al gobierno de facto del General Federico Ponce Vaides, dio lugar a las primeras elecciones libres en ese país, e inauguró un período de diez años de modernización del Estado en beneficio de las mayorías declase trabajadora. La historiografía posterior ha denominado a dicho período como los “Diez años de primavera” o la “Edad de oro” de Guatemala, y actualmente el día 20 de octubre es una fiesta nacional en ese país, conmemorada como el Día de la Revolución de 1944.
Dictadura de Ubico
El constante irrespeto a la Constitución por parte del gobierno autoritario del General Jorge Ubico Castañeda (1931-1944) fue un factor determinante para los hechos que se desatarían en 1944. Su gobierno, que debía de terminar en 1937, fue prolongado en 1935 para un segundo mandato, y en 1941 para uno tercero. Su régimen se caracterizó por la falta de libertades civiles, así como por restricciones a la libertad de expresión. A pesar de iniciar proyectos positivos para el progreso del país, sus políticas en favor de los intereses de las empresas
de Estados Unidos, y la Ley contra la vagancia (según la cual los campesinos debían trabajar de forma gratuita durante 150 días al año en las fincas de los grandes terratenientes), despertaron el descontento popular, y Ubico se vio obligado a renunciar finalmente el 1 de julio de 1944.
Caída de la Dictadura
En junio de 1944 estudiantes universitarios y maestros de la capital, desafiaron el poder de Ubico con una huelga y manifestaciones públicas a las que pronto se agregaron elementos de todos los sectores sociales. El 25 de junio de ese año el descontento con el gobernante llegó al máximo
después de que éste hiciera disolver a los manifestantes que le pedían la renunciadel mando. Ese día cayó muerta María Chinchilla, maestra que se convirtió desde entonces en un símbolo de la lucha.
El 29 de junio se realizó la protesta más grande de la historia de Guatemala, donde más de cien mil personas se manifestaron en contra del asesinato de la maestra María Chinchilla. El movimiento culminó con una huelga general que duró una semana. En ese período, las firmas exigiendo la renuncia de Ubico se multiplicaron. Ante este escenario, Ubico se vio obligado a renunciar el 1 de julio de 1944.
Junta militar y gobierno de Ponce Vaides
Ubico dejó en el poder a una junta militar integrada por los generales Eduardo Villagrán Ariza, Federico Ponce Vaides y Buenaventura Pineda. Al poco tiempo la junta decidió dejar el poder al General Federico Ponce Vaides, a quien la Asamblea Nacional nombró presidente provisional.
Los opositores a la dictadura lo aceptaron, ya que estaba previsto que se celebrarían elecciones presidenciales en un futuro cercano. El 10 de julio de 1944, el Presidente provisional contestó a un memorial en el que se le pedía una declaración “categórica y expresa” de que no aceptaría ser postulado a la presidencia, y aseguró que así sería. El día 12 de ese mismo mes, se estableció que las elecciones presidenciales se celebrarían los días 17, 18 y 19 de diciembre.
Pronto se organizaron nuevos partidos políticos y se lanzaron candidaturas presidenciales. Una de las primeras fue la del coronel Guillermo Flores Avendaño, quien había desempeñado un papel importante en la caída de Ubico, postulado por el Partido Social Democrático. Otros partido fue el de Renovación Nacional, organizado por Carlos Leónidas Acevedo, Óscar Benítez, Francisco Escobar, Alberto Herrarte, Mario Efraín Nájera, Juan J. Orozco Posadas, y Raúl y Rodrigo Robles. En su seno se originó la candidatura deJuan José Arévalo, quien se
encontraba en Argentina. A esta candidatura se unió el Frente Popular Libertador, un grupo conformado básicamente por universitarios.
En el gobierno de Ponce Vaides se acentuaron las persecuciones y la intimidación política. Pese a que Ponce no se atrevía a lanzar una candidatura propia, hacía lo posible por obstaculizar el normal desarrollo de la vida política. La represión aumentó después de ver la multitudinaria recepción dada a Juan José Arévalo a su regreso del exilio, ya que su candidatura había encontrado gran aceptación entre la población. Ponce persiguió y detuvo a varios de los partidarios de Arévalo. Pronto se tuvo la sensación de que nada había cambiado. Los salarios bajaron y la represión aumentó. Ponce no tenía intención de convocar a elecciones, y trató de prolongar su régimen con ilegalidades.
La Revolución
Caída de Ponce Vaides
Los ideales del movimiento popular iniciado en junio habían encontrado eco en la oficialidad joven del Ejército Nacional, y el 20 de octubre de 1944 este ejército, apoyado por las masas trabajadoras, se sublevó y derrocó al general Ponce, después de dos días de combate en los que participaron algunas guarniciones militares. La madrugada del viernes 20 de octubre se vivió en la capital del país una intensa guerra desde todos los puntos. La toma del Cuartel de Matamoros, y la destrucción parcial del Castillo de San José constituyeron algunos de los ataques ocurridos ese día.
Junta militar revolucionaria
En ese momento se instaura un nuevo triunvirato en el poder, integrado por los oficiales Jorge Toriello, Jacobo Arbenz Guzmán y Francisco Javier Arana, quienes convocaron a una Asamblea Nacional Constituyente, en la cual se llamó a elecciones y se invalidaron las leyes y decretos del período liberal y conservador en Guatemala.
Constitución de 1945
Los dirigentes del movimiento armado de octubre formaron una junta de gobierno que conservó el mando de la República hasta el 15 de marzo de
1945. Durante este período se promulgó la nueva Constitución de la República de Guatemala que fue redactada y aprobada por una Asamblea Nacional Constituyente, y en la cual figuraron elementos de todas las clases sociales y corrientes políticas.
Entre otras cosas, la nueva Constitución autorizó la organización de sindicatos, los cuales estaban prohibidos en la era de Ubico, dio autonomía a la Universidad Nacional de San Carlos de Guatemala y creó el cargo de jefe de las fuerzas armadas.
Los gobiernos de la Revolución
Gobierno de Arévalo
Después de las elecciones celebradas en diciembre de 1944, se dio el triunfo del intelectual progresista y catedrático universitario Juan José Arévalo Bermejo, apoyado por una coalición de partidos de izquierda, y cuyo gobierno es considerado “el Primer gobierno de la Revolución”. El 15 de marzo de 1945, Arévalo asumió la presidencia.
El nuevo gobernante tenía el compromiso de dirigir al país hacia la nueva era de libertad y democracia. Se introdujeron reformas en la administración pública, en la educación y en el régimen económico, a la par que se emitían leyes nuevas.
El gobierno de Arévalo creó instituciones que resultaron beneficiosas para el desarrollo del país, como el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS), el Instituto de Nutrición de Centro América y Panamá (INCAP), el Instituto de Antropología e Historia, el Instituto de Trabajo, la nueva Ley Orgánica de la Universidad de San Carlos, el Código de Trabajo y otras leyes que se hacían necesarias, al tiempo que se colocaron las bases ideológicas y jurídicas para un clima democrático.
Los seis años del gobierno de Arévalo no pasaron sin incidentes; hubo intentos de subversión y otros conflictos, a pesar que se permitió el desarrollo de partidos políticos de diversas tendencias y el funcionamiento de la prensa libre. En 1950 se realizaron las elecciones para nuevo presidente y por primera vez, después de muchas décadas, un gobernante entregó pacíficamente el mando a su sucesor.
Gobierno de Arbenz
En 1951 asumió la presidencia el Coronel Jacobo Arbenz Guzmán, joven militar que había participado activamente en el derrocamiento del General Ponce Vaides y que había formado parte de la Junta militar revolucionaria de octubre de 1944. Arbenz le dio continuidad a las políticas de Juan José Arévalo, pero con una tendencia más radicalizada. Su gobierno es conocido como “el Segundo gobierno de la Revolución”.
Al llegar al poder, Arbenz declaró sus intenciones:
“Nuestro gobierno se propone iniciar el camino del desarrollo económico de Guatemala, tendiendo hacia los tres objetivos fundamentales siguientes: convertir nuestro país de una nación dependiente y de economía semicolonial en un país económicamente independiente; convertir a Guatemala de país atrasado y de economía predominantemente semifeudal en un país moderno y capitalista; y hacer que esta transformación se lleve a cabo en forma que traiga consigo la mayor elevación posible del nivel de vida de las grandes masas del pueblo.”
Inició una reforma agraria que aumentaría la productividad de y el nivel de vida de los campesinos indígenas del área rural, pero ésta se
estrelló contra el poder y la influencia de los grandes terratenientes, entre los que destacaba la poderosa compañía norteamericana United Fruit Company. Arbenz proponía la expropiación de las tierras improductivas y su cesión en usufructo a campesinos necesitados. Propuso expropiar las tierras de la United Fruit Company al precio de valoración que la compañía usaba para liquidar sus impuestos.
La Contrarrevolución
Diez años después, en 1954, los opositores al gobierno de Arbenz se unificaron en el llamado Movimiento de Liberación Nacional. Bajo el mando del Teniente Coronel Carlos Castillo Armas y con el apoyo de la CIA de EE.UU., país que había visto lesionados sus intereses por las políticas contra la United Fruit Company, y había tachado a Arbenz de “comunista”, se iniciaron los planes para el derrocamiento en la denominada “Operación PBSUCESS”.
Con el apoyo de las dictaduras de Nicaragua y Honduras se planeó una invasión desde este último país, se reunió un pequeño ejército, cuyos aviones incursionaron sobre Guatemala, arrojando propaganda contra el gobierno y atacando objetivos militares. El 18 de junio de 1954, el Ejército de Liberación invadió el país por Esquipulas y tomóChiquimula. Al presidente Arbenz solamente una sección del ejército le dio su apoyo por lo que no pudo oponer una resistencia efectiva, y al dar la orden de repartir las armas del ejército entre el pueblo ya era demasiado tarde. La invasión ya había avanzado demasiado. Arbenz renunció el 27 de junio, dejando la presidencia en manos del Coronel Carlos Enrique Díaz,
jefe de las Fuerzas Armadas, y se asiló en la embajada de México.
El Coronel Díaz fue sustituido por una junta militar integrada por los coroneles Elfego H. Monzón, José Luis Cruz Salazar y Mauricio Dubois. El
Coronel Monzón, presidente de la junta militar, firmó con Castillo Armas, en San Salvador, un pacto que puso fin a la guerra, y le otorgó el poder a éste, quien inmediatamente devolvió las tierras a los terratenientes e inauguró un período de sucesivas dictaduras militares en el país, fuertemente alineadas con la política de Estados Unidos.




sábado, 15 de octubre de 2016

EL DILEMA DE LAS TAREAS ESCOLARES ( Adolfo Yarhi)

Recientemente fue publicada una noticia que indicaba que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) proponía prohibir las tareas escolares en todo el mundo. La misma publicación cita al Dr. Harris Cooper, Profesor de Psicología y Neurociencias de la Universidad de Duke quien declaró no haber encontrado evidencia de que las tareas ayudaran a los niños a ser mejor estudiantes. Aunque esta noticia fue publicada en diversos periódicos en todo el mundo, no encontré su fuente original. No obstante, evidencié que muchos países en todo el mundo ya han tenido esta discusión desde hace años: en 1956 Francia prohibió por decreto que los colegios enviaran tareas escritas a casa; Bélgica regula las tareas escolares a través de diversos decretos desde el año 2001; el estado de California en Estados Unidos abolió las tareas para primaria en el 2009; en el año 2014 el consejo de la ciudad de Hallstahammar, en el centro de Suecia, discutía respecto a la eliminación de tareas escolares; este año el Ministerio de Educación de Chile ya pasó al Senado un proyecto de ley para que se eliminen las tareas y en Colombia ya han iniciado a tener discusiones en este respecto.
Desde finales de la década de los ‘80s del siglo pasado se han realizado estudios en diversos países para determinar el impacto de las tareas en el aprendizaje. Algunos estudios concluyen que alumnos que dedican una hora diaria a tareas escolares son mejores estudiantes que quienes dedican cuatro horas en casa a sus tareas.
Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), fundada en 1961 con sede en Francia y la cual aglutina a 34 países miembros, los estudiantes de 15 años dedican más tiempo a realizar sus tareas que a cualquier otra actividad relacionada con el aprendizaje. Un estudio que la OCDE realizó en el 2009 no encontró correlación entre el tiempo que los estudiantes dedican a las tareas escolares y sus resultados en pruebas estandarizadas. En Singapur, los estudiantes dedican unas 11 horas semanales a realizar tareas en casa, mientras que en Finlandia dedican menos de tres horas sin necesidad del apoyo de legislación alguna. Sin embargo, ambos países están entre las mejores posiciones a nivel mundial en las pruebas PISA.
Krista Kiuri – quien fue Ministra de educación de Finlandia el 2013-2015 y en cuyo país muchos estudiantes hablan tres o cuatro idiomas – dijo en una entrevista que los niños necesitan más tiempo para ser niños y disfrutar de la vida. Los educadores finlandeses creen que los niños tienen otras cosas importantes que hacer después de la escuela, como estar juntos o con sus familias, hacer deportes, escuchar música o leer. El director de una escuela en Finlandia dice que si los niños pasan el tiempo después de la escuela subiéndose a los árboles, posiblemente aprenderán respecto a los insectos que vean. Los maestros finlandeses creen que la escuela debe ser para que los niños encuentren lo que necesitan aprender para ser felices y por eso les enseñan a utilizar su cerebro de la mejor forma posible. Los niños desarrollan autonomía y aprenden a ser independientes. Les enseñan a pensar por sí mismos y a ser críticos de lo que aprenden. Aprenden a ser personas felices y a respetar a otros y a sí mismos. Los finlandeses saben que hay más en la vida que la escuela.
Pero ¿habrá realmente beneficios significativos en la eliminación de tareas? Algunos creen que las tareas contribuyen a que los alumnos se vuelvan haraganes y a obtener ayuda de sus padres para realizarlas y que en muchos casos, éstos terminan haciéndoselas. Algunas investigaciones demuestran que el estudiante que deja de hacer tarea en su casa recupera su alegría por el estudio y se transforma en una persona feliz. Del lado familiar, la ausencia de tareas dan oportunidad a los padres a conectarse más con sus hijos de una manera más significativa y a cuidar mejor los hábitos de alimentación y sueño. En hogares en donde los niños tienen la responsabilidad de cuidar a sus hermanos menores, su desempeño escolar puede ser afectado negativamente si, además, debe hacer tareas, agregándole tensiones que niños y jóvenes no debieran tener. El estrés infantil puede llegar a provocar una depresión prematura.
La educación de un niño no debe ser solo en el aspecto académico. Cada momento de su día puede convertirse en momento de aprendizaje no formal, ya sea aprendiendo a trabajar colaborativamente mientras juega futbol, desarrollando sus destrezas sociales mientras juega con otros niños o aprendiendo del uso cotidiano de la matemática mientras acompaña a su madre al supermercado. Por otro lado, las tareas en casa tienden a tener una perspectiva conductista, en vez de propiciar el aprendizaje constructivista mediante el descubrimiento, reforzando los paradigmas de la educación tradicional. Tanto estudiantes, padres y maestros deben dedicar más horas del día a realizar, apoyar o evaluar las tareas, contribuyendo al agotamiento que puede generar resultados contraproducentes. Por otro lado, es importante que los niños tengan tiempo de esparcimiento y relajación.
Tal y como expresé en mi artículo de la semana pasada, “el objetivo de la educación no debe ser graduar personas que conozcan muchas cosas y que puedan recitar muchos datos sin siquiera comprenderlos. Debe ser crear ciudadanos del futuro que puedan relacionar su aprendizaje con su contexto y aplicarlo en su vida para contribuir a formar mejores sociedades. La educación debe transformar a los estudiantes en personas pensantes, capaces de discernir, empáticas, que logran comunicarse adecuadamente y que logran buscar soluciones creativas a los problemas de la vida”. A esto agrego que la educación también debe producir personas felices.

domingo, 9 de octubre de 2016

OBJETIVOS DE LA EDUCACION segun Adolfo Yarhi

La concepción de la labor del docente es que debe educar y muchos creen que cuando los niños van a la escuela, los maestros les transmiten conocimientos, creyendo por ende que educar es la transmisión de conocimiento. Según el Diccionario de la Real Academia Española, “educar” es “desarrollar o perfeccionar las facultades intelectuales y morales del niño o del joven por medio de preceptos, ejercicios, ejemplos, etc”. Si alguna vez lo fue, -seguramente nunca- la transmisión de conocimientos ya no es a lo que la educación debe apuntar. El psicólogo, pedagogo y filósofo norteamericano John Dewey decía que “el conocimiento no es algo separado que se baste a sí mismo, sino que está inmerso en un proceso por el cual la vida se sostiene”.
A menudo los alumnos se preguntan cuándo utilizarán un conocimiento específico, por ejemplo de Matemática, aseverando que desean ser médicos, abogados, escritores o psicólogos y que nunca les servirá en sus vidas el aprender a despejar ecuaciones algebraicas, saber como determinar el área de un triángulo obtusángulo, o encontrar el ángulo de inclinación de una pendiente. Hay una alta probabilidad que tengan razón y que no necesitarán en sus vidas profesionales o cotidianas estos conocimientos específicos. Pero el objetivo del aprendizaje Matemático no es el conocimiento en sí, sino obtener las herramientas necesarias para encontrar alternativas creativas a problemas complejos, descubrir algún patrón o discernir entre alternativas. El aprendizaje Matemático nos ayuda a prever consecuencias de nuestras acciones. Nos prepara para resolver problemas complejos de la vida, a pensar en forma estructurada y a desarrollar agilidad mental. El que una persona recuerde años después de haberse graduado del colegio como factorizar – o siquiera qué significa factorizar – es menos importante a que pueda esquematizar la forma de resolver una situación de la manera más sencilla posible.
Aprender historia – más que enseñar hechos puntuales que sucedieron en un momento determinado y memorizarlos, nos enseña a analizar los hechos, comprenderlos bajo el contexto en que sucedieron, a desarrollar la capacidad de análisis al evaluar los posibles resultados si algún hecho histórico hubiera sido distinto y a comprender mejor el presente; si vivimos en época de paz, nos sería difícil comprender respecto a lo que significa una guerra o menos que la estudiáramos. Conocer de los hechos históricos de la Revolución del ’44, de los golpes de Estado que han afectado la realidad de nuestro país y de los sucesos de los últimos 15 años en países como Venezuela seguramente tuvieron impacto en la forma en que se dieron las manifestaciones pacíficas de abril a septiembre del año pasado. Algunos piensan que al enseñar a los niños a jugar futbol tiene el objetivo de que puedan llegar a ser grandes estrellas por medio de aprender técnicas propias de este deporte, cuando en realidad lo que aprenden es a trabajar en equipo, a pensar estratégicamente, a cuidar su cuerpo y a formar valores cuando ganan o pierden un partido.
No implico que el conocimiento no sea importante. En esta era de información es fácil buscar información a través de Internet. Más que buscar transmitir este conocimiento a sus alumnos, el maestro debe actuar como facilitador de sus estudiantes guiándolos en cómo discernir cual conocimiento es útil, cómo analizarlo y cómo aplicarlo a su contexto. El desarrollo de destrezas y competencias que puedan aplicarse a distintas situaciones de la vida son el verdadero aprendizaje. Los padres se preocupan a menudo de las calificaciones de sus hijos y si estas bajan de un número que se han fijado en su mente, temen que sus hijos serán un fracaso en la vida porque no habrán aprendido lo que necesitan. Sin embargo, dudo que a alguien le hayan preguntado en alguna entrevista de trabajo respecto a la calificación que sacó en Ciencias naturales en 5to. grado de primaria o que le pidan demostrar el teorema de Pitágoras. Más bien, el entrevistador evaluará entre otras cosas, si el candidato tiene aptitudes para trabajar en equipo, cómo se desempeña bajo presión, si tiene habilidades para resolver problemas y si puede comunicarse de una manera efectiva. Por supuesto, deberá tener conocimientos del trabajo al que está aplicando, pero su capacidad de enfrentarse a la vida posiblemente tenga más relevancia.
Cómo padres de familia fortalecemos más el aprendizaje de nuestros hijos guiándolos para que desarrollen un sentido de responsabilidad de entregar puntualmente sus tareas escolares y poner su mejor esfuerzo, que en buscar que obtengan la mejor calificación en la misma, la cual pudieran obtener sin utilizar su propio esfuerzo. Les enseñamos de los logros a través de sus fracasos; sin embargo, muchos padres buscan evitarles a sus hijos el “dolor” o la “vergüenza” de fracasar, en vez de buscar aprovechar la experiencia como un aprendizaje para la vida.
El objetivo de la educación no debe ser graduar personas que conozcan muchas cosas y que puedan recitar muchos datos sin siquiera comprenderlos. Debe ser crear ciudadanos del futuro que puedan relacionar su aprendizaje con su contexto y aplicarlo en su vida para contribuir a formar mejores sociedades. La educación debe transformar a los estudiantes en personas pensantes, capaces de discernir, empáticas, que logran comunicarse adecuadamente y que logran buscar soluciones creativas a los problemas de la vida.